viernes, 30 de septiembre de 2011





¿Que dio origen al Ministerio?
“una noche al mirar el drama de la vida de un pequeño niño que sufría a consecuencia de los maltratos que le ocasionaba su padre alcohólico, le golpeaba y obligaba a pedir dinero en las calles; Dios conmovió mi corazón y esa noche, al no poder dormir, el Señor me hacía pensar en tantas historias tristes y lamentables que viven cientos de niños y niñas cada día en mi país. En esa ocasión, rogué a Dios que me ayudara para poder hacer algo por esos pequeños y cambiar ese tipo de situación que agobia la vida de tantos niños y niñas.
Junto a mi esposa orábamos para que fuera Dios, quien nos guiara en el servicio de su obra a favor de la niñez desprotegida. En respuesta a nuestras oraciones, el Señor me puso el sentir de entregarnos a tiempo completo a su obra, para ello tuve que renunciar a mi trabajo y añadir nuevos miembros a mi familia, ya que todos los niños y niñas que albergábamos nos llamaban a mi esposa y a mí, MAMÁ Y PAPÁ;  y a través del amor de Jesús, les brindamos el cariño que nunca recibieron de sus progenitores.
Gracias al Señor que Él proveyó cuando no había alimento en la mesa de nuestros pequeños. Nosotros nos dedicábamos a vender adornos, casa por casa en cada colonia y pueblo de San Salvador; pedíamos donativos de alimentos a los vendedores de los mercados y empresas privadas; constantemente solicitábamos a los hermanos y hermanas de nuestra congregación y otras congregaciones amigas, a que rogasen al Señor por nuestro Ministerio, para que fuera Él quien supliese las necesidades de alimentación, vestuario, salud y educación de la niñez que conformaba nuestro nuevo hogar. Recordando Su Palabra, cuando nos dice: “Buscad el Reino del Señor y todo lo demás os vendrá por añadidura” (Mateo 6.33). Esto ocurrió durante un aproximado de dos años, de los cuales podemos asegurar que Dios suplió cada una de las necesidades que se presentaron en nuestro albergue infantil; de este hecho surgió el título de nuestro MINISTERIO “JEHOVA JIREH”, que en su traducción significa: “DIOS PROVEERA”.



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